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Estas nuevas normas proporcionarán más información a los consumidores de pescado. (Dibujo: Oddvar Dahl, Nofima)
Aprueban nuevas normas ISO para productos pesqueros
(NORUEGA, 1/13/2012)
Se acaban de aprobar dos estándares nuevos de la Organización Internacional para la Estandarización (ISO) para la trazabilidad de los productos del mar.
“Estas normas brindarán a los consumidores de todo el mundo acceso a más información sobre los productos del mar que consumen”, señala Petter Olsen, científico en jefe del Instituto Noruego para la Investigación en Alimentos, Pesca y Acuicultura (Nofima), de Tromsø, que lideró el trabajo relacionado con las nuevas normas ISO.
Los nuevos estándares ISO especifican qué información debe registrarse en cada eslabón de la cadena de producción por la que atraviesan los productos pesqueros.
En otras palabras, los estándares establecerán la información que debe registrarse en un barco de pesca o una granja acuícola, en la compañía procesadora, la empresa de transporte y el mayorista, y en la tienda que vende el pescado al consumidor. Una norma ISO se aplica al pescado silvestre y la otra al pescado cultivado.
“Hoy se transportan grandes volúmenes de productos pesqueros a distancias muy largas antes de que lleguen a los consumidores. Si todas las etapas de la cadena de abastecimiento siguen las normas ISO, será posible rastrear los productos a lo largo de toda la cadena de distribución hasta el lugar donde se capturó o cultivó”, explica Olsen.
“En consecuencia, la gente podrá saber de dónde provienen sus productos del mar, sus características, el recurso utilizado y el perfil ambiental”, agrega.
Las normas ISO nuevas se fundamentan en los estándares TraceFish, que fueron desarrollados en un proyecto de la Unión Europea dirigido por Olsen hace unos años. Los estándares TraceFish son un requisito obligatorio en algunos países asiáticos, pero no en Noruega.
“Unas pocas compañías noruegas utilizan todas las partes de los estándares que existen hoy. Pero en el futuro, creo que más empresas adoptarán esto”, comenta Olsen.
“Las compañías que adopten las normas pueden tener ventajas para llegar a los consumidores, a través de un sólido perfil ambiental, y pueden tener oportunidades para firmar contratos a largo plazo, de manera más predecible y con precios más altos. Las normas ISO también mejorarán el intercambio de información y evitarán que se duplique el trabajo en las compañías.”
Los usuarios posibles de los estándares ISO nuevos son los pescadores, las granjas acuícolas, las compañías procesadoras, las subastas de pescado, las empresas transportadoras, los distribuidores, los mayoristas y los minoristas.
Una de las normas ISO, ISO 12875:2011, se aplica al pescado silvestre; la otra, ISO 12877:2011, es para el pescado cultivado.
Estas son las primeras normas ISO con este nivel de detalle para la trazabilidad alimentaria. Podrían utilizarse como ejemplo cuando se desarrollen estándares ISO similares para otros productos alimenticios.
Fuente: Nofima
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